Último jueves de mes y no teníamos la certeza de que se fuese a disputar por la alta probabilidad de lluvia que daban para ese día. Al final según se iba acercando el jueves, la cosa fue mejorando y de hecho daban posibilidades casi nulas ese día de que lloviese en la franja horaria en la que jugábamos.
Pero claro, esa es la teoría, luego en la práctica, a una hora para la disputa del encuentro la imagen de a continuación valía más que mil palabras...
El nubarrón que se avecinaba era de padre y muy señor mío. Al final tuvimos suerte y sólo cayó de forma débil durante 5-10 minutos del partido sin que llegase a dejar el pavimento resbaladizo.
Tocaba modalidad AMIGOS DE vs AMIGOS DE, los dos primeros del Ranking echaban a suertes. Los afortunados fueron Jesús y Antonio Brasil.
LOS ROJOS
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| De izqda a dcha, Jesús, Felipe, Ángel II, Paco, David y Zalo |
LOS AZULES
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| De izqda a dcha, Gonzalo, Antonio Bonilla, Javi, Antonio Brasil, Juanjo y Jesús Delgado |
Los Rojos empezamos perdiendo 0-1 con un gol de Antonio Bonilla en un balón que se quedó muerto en el área pequeña. Seguidamente empató Zalo y la maquinaria roja comenzó a funcionar. Nos llegamos a poner 3-1 gracias sobre todo a Jesús que, interceptaba los pases contrarios en su banda y se iba como un misil a la portería rival con una efectividad tremenda.
Luego los Azules tuvieron su momento de achuche recortando distancias en el marcador 3-2 y con la sensación de que iban a empatar más pronto que tarde debido a la racha de nerviosismo extremo y de dimes y diretes a la hora de defender las jugadas en el que estaba inmerso el equipo azul que hizo que estuviésemos totalmente descolocados tanto táctica como mentalmente. También coincidió con Jesús en el banquillo.
Con la vuelta de Jesús al terreno de juego poco a poco fue volviendo todo a la normalidad y a partir de ahí fuimos un ciclón repletito de efectividad llegando a ponernos 8-2 en el luminoso.
Esto pasó factura a los Rojos que empezaron a jugar más a lo loco, no daban una a derechas frente a nuestra defensa que estaba siendo firme. Llegaron a jugar hasta con portero jugador y con cinco jugadores de campo. Claro, en el momento que les cortábamos alguna jugada tirábamos desde lejos y metíamos sin portero, a puerta vacía. Por ejemplo, Zalo fue el encargado de estrenar ese tipo de goles marcando uno desde casi su propio área.
Los dos últimos goles fueron de los Rojos estableciendo el 8-4 definitivo ya con el tiempo cumplido. Uno de Jesús Delgado de bonita factura haciendo una virguería de espaldas a la portería y otro de penalti de Gonzalo.
Para ir terminando, decir que en ningún momento el equipo rojo temió por la victoria. Sólo tuvo ese momento crítico con el 3-2 pero se quedó en anécdota de un momento muy puntual. En general tuvo grandes triangulaciones, defendió muy bien y fue muy efectivo de cara a puerta haciendo cualquier atisbo de remontada por parte de los Azules una montaña difícil de escalar.
Jugadores claves fueron Jesús y sobre todo quiero destacar a Ángel II, que lleva unos cuantos partidos bastante centrado y sabiendo qué hacer en cada momento con la calidad, definición y efectividad que atesora y midiendo muy bien el tempo de partido.
Como anécdota, Jesús en la elección de equipos consiguió reunir a las viejas glorias de Waikiki.
Goles de los Rojos: Zalo (3), Ángel II (2) y Jesús (3).
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