sábado, 28 de noviembre de 2009

ENTRENAMIENTO 26-11-09

Para este jueves el entreno estaba cogido con alfileres ya que el día se levantó en plan paisaje gallego (niebla y el cielo encapotado) y durante toda la jornada estuvo cayendo una fina lluvia que no se puede casi ni considerar como tal pero que dejó la pista bastante humeda y resbaladiza por lo que se hizo bastante difícil asentarse sobre el terreno a pesar de que la habían pintado hace poco.

En este entreno reapareció Rubén después de muchos meses sin venir y lo hizo a lo grande.

Al ser último jueves de mes, les tocaba echar a suertes a los dos primeros del Ranking. Para esta ocasión fueron Miko y Durio.


En el equipo de Durio fueron Victor, Felipe, Rubén, José Luis y Ricardo y en el de Miko, Paco, Adolfo, Ángel, un servidor y Joan.


Empezamos el partido bien pero también porque Rubén estaba en el banquillo. No obstante en la primera que nos llegaron, Durio de un punterazo estableció el 1-0 en el marcador. Poco después empaté para los míos al revolverme en el área y un poquito más tarde Durio volvía a adelantar a los suyos de nuevo con otro punterazo.


A partir de ahí el equipo de Durio creció y no pudimos hacerles frente en ningún momento. Rubén actuó de magnífico director de orquesta y movió los hilos de su equipo a su antojo sabiendo cuándo había que frenar, cuándo acelerar y cuándo dar unos gritos de ánimos o de aviso a sus compañeros en momentos de menor fluidez en el juego.


No puedo decir de cuántos perdimos pero sí de muchos, quizás 13-3 o 14-3... y fue un encuentro descafeinado en cuanto a emoción ya que casi desde el principio la cosa estuvo clara de quién se iba a llevar la victoria esa noche.


Poco puedo añadir más... Que para el siguiente espero que esté más igualado y que yo termine con mi gafe de derrotas. Jugador que viene conmigo, le hago perder así que, ojito ;-)


Me flipó para bien: Por encima de todos, Rubén. Aunque el resto del equipo jugó genial, el 8 de Waikiki hace jugar bien a todos. De Durio me quedo con su confianza ciega en balones que parecen perdidos y siempre obtiene su recompensa.
Me flipó para mal: en un momento determinado del entreno, casi al final, todo mi equipo estábamos con la cabeza gacha y deprimidos ya que nos estabán haciendo una verdadera sangría, y más con esa actitud.
También la pista. Por más que la han reformado y pintado, sigue resbalando con nada que haya llovido antes. Tendría que cambiar la superficie y poner cemento.
Me dejó anonadado: Miko se olvidó los pantalones cortos y jugó con el chandal. Está claro que le dió mala suerte. Pro su parte, Victor también se olvidó de esa improtante prenda y ni corto ni perezoso salió a la cancha con el pantalón de vestir. Eso sí que es triunfar!

1 comentario:

zalo32 dijo...

David y Adolfo, nadie quiere ir con vosotros!!!
Víctor, tienes que jugar al mismo tiempo con ese pantalon y el jersey de lana de la otra vez!!